JD Power es una empresa independiente que analiza de forma imparcial la fiabilidad de todos los fabricantes de automóviles con actividad en el mercado estadounidense. Este es un resumen de su último y reputado estudio, el cual pública anualmente con la finalidad de ofrecer al consumidor información valiosa y rigurosa sobre el sector. Para realizarlo encuesta a decenas de miles de propietarios con coches cuya antigüedad no ha de ser superior a tres años. En este caso, los vehículos fueron comprados entre 2019 y 2022.
Habiéndose recopilado datos referentes a la fiabilidad, que más tarde se clasifican en un total de nueve categorías (sistema de propulsión; sistema multimedia; sistemas de ayudas a la conducción; climatización; pantallas, controles y funciones varias; asientos; estado exterior; estado interior; y experiencia a bordo), se ha determinado una lista que ordena de menos a más problemáticas las marcas de automóviles con mayor volumen en EE.UU. La unidad de medida empleada es xPP100, es decir, el número de errores o fallos por cada 100 vehículos. ¿Cuáles son las compañías que han obtenido mejores y peores posiciones?
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En la línea de los análisis anteriores, las firmas orientales (concretamente japonesas y surcoreanas) han demostrado ser, de nuevo, las más fiables. Lexus (1), Genesis (2) y KIA (3) ocupan los puestos de podio. De las 32 examinadas por JD Power, completan el “Top 5” dos de origen norteamericano y propiedad del grupo industrial General Motors. Es el caso de Buick (4) y Chevrolet (5).
La zona más baja de la tabla, donde se encuentran los peores resultados del estudio en cuestión, queda compuesta por fabricantes “premium” o de alta gama de Reino Unido, Alemania y Estados Unidos. La razón es simple. Se debe a que sus productos cuentan con mucho equipamiento y mucha tecnología susceptible de sufrir averías relacionadas con el software.