Todo parece cerrado para que la Unión Europea prohiba la comercialización de coches con motor de combustión a partir del año 2035. Pero ante la reclamación de varios países, se está abriendo una puerta para que los coches con este tipo de propulsores continúen siendo legales a partir de esa fecha. Italia fue el primer país en plantear exclusiones para esta medida, pero se han unido Hungría y Polonia. Ahora es el momento de Alemania para plantear excepciones.
En este caso, Alemania plantea la posibilidad de que los motores de combustión funcionen a partir de esa fecha solo con combustibles sintéticos. Este tipo de combustibles, de los que Alemania es el principal productor y que invierte grandes cantidades de dinero en ellos, no emiten gases contaminantes y podrán ser una buena alternativa a los combustibles naturales, que son los que presentan problemas de emisiones.
Motores sí, pero con combustible sintético
La propuesta planteada por Alemania tiene que ver este tipo de combustible. La excención vendría impuesta por el uso de estos combustibles sintéticos. Si se da el caso, se podrán comercializar los modelos que tengan motor de combustión que funcionen con ellos, mientras que todos los demás quedarían prohibidos en todo el espacio europeo.
La hoja de ruta de la Unión Europea se basa en dos fechas. La primera de ellas es 2030, cuando se establece que ya no se podrán vender los coches que no tengan algún tipo de electrificación que reduzca las emisiones. En 2035 es cuando se prohibirá la comercialización de todos los coches que cuenten con un motor de combustión.
Italia ha insistido en los inconvenientes de prohibir los coches con motor de combustión en el año 2035 y propone una redución de emisiones del 90% para 2035
Ante esa prohibición, los países que más motores producen quieren plantear exenciones que eviten la desaparición total de los mismos. Alemania propone esta medida, mientras que Italia plantea que los vehículos de lujo, de marcas que fabrican menos de 1.000 unidades al año, se salgan también de la norma. Todas estas cuestiones pueden hacer que la decisión final al respecto se retrase un tiempo y que existan excepciones a la ley.
Eso quiere decir que a partir de 2030 se podrán seguir comercializando coches con motores de combustión, siempre y cuando cumplan con las excepciones que se pueden plantear a partir de estas peticiones. Esto, claro, si aprueban las peticiones que van a presentar Alemania y otros países al Consejo Europeo.