Qué tiempos aquellos en los que la oferta de compactos deportivos era casi interminable. Había modelos de casi todos los precios y con una relación calidad-precio que, actualmente, es impensable. No obstante, aunque con unos precios casi desorbitados, todavía hay un buen número de opciones si te estás planteando la compra de un deportivo de estas características.
El compacto francés es, bajo mi punto de vista, la mejor opción que ofrece el mercado. Pese a que los rivales que tiene enfrente se sitúan a un nivel muy alto, el modelo de Renault es un gran coche como deportivo. Es cierto que hay opciones más potentes, pero el Mégane cuenta con un bastidor y una puesta a punto exquisita.Su gama, que se ha reducido, ofrece solamente dos versiones. Una de acceso y, otra, denominada Trophy, con una puesta apunto más radical en cuanto a suspensiones se refiere. En ambos casos, el motor es un cuatro cilindros de 1.8 litros y el cambio es un automático de doble embrague de 6 velocidades (ya no hay posibilidad de adquirir este coche con transmisión manual).Si el Mégane es tu elegido, algo que desde aquí te recomendamos, debes darte mucha prisa, pues Renault va a dejar de fabricarlo en breve. Una pena.
El CUPRA León es otra opción fantástica con una relación calidad-precio también imbatible. No llega a la eficacia del Mégane, pero está a un gran nivel (el Mégane R.S. tiene algo más de picante y es un coche más recomendable como deportivo).La oferta de modelo español es mucho más completa que la del Mégane, pues cuenta con diferentes opciones mecánicas. No obstante, si nos centramos en la versión VZ de 300 CV, tendrás una opción muy interesante por precio, prestaciones y comportamiento dinámico. Su conjunto motor-cambio funciona de maravilla. El motor de gasolina es un