El Polestar 4 fue presentado este lunes en el Salón del Automóvil de Shanghai, y lo cierto es que nos ha dejado perplejos por su espectacular y cuidado diseño, sin olvidar tampoco la avanzada tecnología que integra. Si quieres conocer más detalles sobre este nuevo SUV Coupé del fabricante sueco, ahora bajo control del gigante chino Geely, puedes echar un vistazo a todo lo que te contamos sobre él ayer mismo, aquí en DrivingEco.
Una peculiaridad del Polestar 4 que no llegamos a mencionar, sin embargo, es la ausencia de cristal trasero. Una decisión de diseño absolutamente innovadora que no habíamos visto hasta ahora en ningún modelo eléctrico. Pero, ¿por qué ha tomado Polestar este camino? ¿Qué ventajas y desventajas tiene esta decisión? Veámoslo a continuación.
Lo primero de todo recordar que Polestar ya adelantó la posibilidad de eliminar el cristal trasero en uno de sus futuros modelos eléctricos con la presentación del prototipo Precept en 2020. El Polestar 4 ha sido el primer modelo del fabricante en implementar esta idea, pero probablemente no será el último. En este nuevo SUV Coupé el techo de cristal se extiende por encima de los ocupantes de las plazas traseras y justo allí se fusiona ya con el panel que cubre la zona posterior del vehículo. El cristal del techo es además fotocromático para proteger mejor a los ocupantes en los días de mayor radiación solar.
Y ahora ¿cómo veo si llevo a alguien detrás?
El primer problema que surge con esta decisión de diseño es que no es posible para el conductor ver el tráfico posterior mediante un espejo retrovisor interior convencional. Un problema que tiene, sin embargo, una sencilla solución simplemente integrado una cámara posterior y un retrovisor digital, que es precisamente lo que ha hecho Polestar.
Para Thomas Ingenlath, el actual Director Ejecutivo de la firma sueca, este retrovisor digital es incluso mejor que uno convencional ya que mejora la seguridad, especialmente de noche. Según explica, con él se pueden ver mucho mejor a los vehículos que circulan por detrás cuando el sol ya ha caído y además, simplemente pulsando un botón, se convierte en un espejo convencional si lo que quieres es ver qué tal se están portando tus hijos en las plazas traseras.
La eliminación del cristal trasero tiene, por otro lado, una importante ventaja y es que ayuda a mejorar la eficiencia del vehículo, ya que de este modo se reduce su peso y también el coeficiente aerodinámico. Un menor consumo energético que, como no podía ser de otro modo, se traduce una mejora en la autonomía.
En definitiva, una interesante solución de diseño que no nos extrañaría lo más mínimo que acabe por convertirse en tendencia en el sector de la movilidad eléctrica. Veremos si realmente es así, o si por el contrario el Polestar 4 acaba siendo simplemente un vehículo peculiar.
El artículo El Polestar 4 prescinde del cristal trasero pero incluye una cámara aparece primero en Driving ECO.