La historia del Mercedes Clase E es una de las más largas y profusas del sector del automóvil. Llegó al mundo hace más de 75 años aunque no con la denominación comercial actual y en todo este tiempo ha vendido más de 16 millones de unidades. Ahora ve la luz una nueva generación, con código interno W214, que supera a sus predecesores en todo. Tiene una imagen más potente, más calidad, tecnología, seguridad y motores más ecológicos…
Pero como sucede con cada nueva generación, el Mercedes Clase E convence a unos y disgusta a otros. No es que este nuevo W214 sea conservador pero según se mire cabría pensar que estamos ante uno de sus predecesores. Y este pequeño «pero» parece que quiere ensombrecer su debut pero el arsenal tecnológico que le acompaña hará que el público más crítico rectifique. En todo caso, te toca a ti juzgar si es tan bueno como para ser un rotundo éxito.
La imagen del Mercedes-Benz Clase E W214 es más elegante pero recuerda, en sus ópticas, a sus predecesores de doble faro…
«Para gustos los colores» este es el refrán que se podría aplicar al nuevo Mercedes Clase E. Sí, porque para unos todas sus líneas serán continuistas y para otros serán vanguardistas. En todo caso destaca por sus nuevas ópticas Full LED (en opción LED Digital Light) con la nueva firma luminosa para la función diurna. Ambas flanquean la parrilla de generoso tamaño y diferente estilo según el acabado elegido. Este mismo patrón es el que sigue el paragolpes.
Si vamos a la vista lateral descubriremos (aunque no se ve bien) que el Clase E «encoje» 2 centímetros. Ahora se queda en 4,92 metros de largo por 1,91 metros de ancho y 1,47 metros de alto más 2,93 metros de batalla. Estas cotas se traducen en