Con la llegada del Model 3 al mercado, hace ya algunos años, Tesla introdujo por vez primera una cámara en interior del habitáculo enfocando a los ocupantes del mismo. En principio y durante varios años esa cámara estuvo inhabilitada, pero el fabricante americano prometió que en un futuro podría ser utilizada para su servicio de RoboTaxis que aún seguimos esperando.
Tesla comenzó a utilizar la cámara interior de sus vehículos hace un par de años para monitorizar la actividad del conductor, especialmente los ojos, para asegurarse así de que está prestando atención a la carretera en todo momento. Y ese parece que va a ser finalmente el uso principal de esa cámara interior, potenciando todavía más sus capacidades.
Según un reporte publicado por el hacker Green –@greentheonly-, en el código del software de Tesla para sus vehículos aparecen algunos indicios que señalan que la compañía ha comenzado a analizar algunos gestos, como bostezos o parpadeos de los ojos excesivamente prolongados, que podrían indicar que el conductor se está comenzando a quedar dormido al volante.
«Al parecer Tesla planea potenciar de forma considerable la monitorización de la actividad del conductor. Ahora están empezando a prestar atención a algunos gestos, como el número de bostezos del conductor en un determinado periodo de tiempo, o el número de parpadeos y su duración. Todo ello con el objetivo de calcular cuál es la probabilidad de que el conductor se quede dormido.»
Siempre atento a que tú mantengas la atención en la carretera
Este hacker explica, así mismo, que aunque el código está ahí, de momento permanece oculto y su existencia no se muestra en ningún elemento de la interfaz de usuario. Por otro lado, afirma que le ha llamado la atención que la monitorización de estos gestos se estaría produciendo en todo momento, y no únicamente cuando el Autopilot está activado, como podría suponerse.
El sistema desarrollado por Tesla estaría además prestando atención a lo centrado que circula el vehículo por su carril cuando el Autopilot está desactivado, ya que ese es también un signo claro de que el conductor puede estar comenzando a dormirse; o al número de veces que el sistema de mantenimiento de carril tiene que alertar al conductor. Combinando todos esos datos con los gestos del conductor, Tesla estaría realizando una estimación de la probabilidad de que el conductor se pueda dormir al volante, mejorando así la seguridad de sus vehículos en la carretera al evitar los accidentes producidos por este motivo.
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