La salida de Reino Unido de la Unión Europea, más conocida como Brexit, tuvo lugar hace más de tres años. Desde entonces no han cesado las consecuencias en absolutamente todos los ámbitos y el sector del automóvil no es una excepción.
La última de ellas tiene que ver con Stellantis y las dos fábricas que tiene en Reino Unido (Ellesmere Port y Luton). El gigante automovilístico dirigido por Carlos Tavares ha instado al gobierno británico a renegociar el acuerdo del Brexit para garantizar la rentabilidad de su producción en Inglaterra; de lo contrario, podría dejar de fabricar coches eléctricos allí.
Stellantis podría arrastrar a otros fabricantes
El Brexit fue un duro revés para la industria del motor británica. Desde antes de que Reino Unido saliese de la Unión Europea, esta decisión tomada por la mayoría de británicos en referéndum tiene consecuencias para el sector del automóvil.
En Motorpasión
El grupo Stellantis lo tiene claro: pide que los coches chinos paguen aranceles para entrar en Europa
El cierre de la fábrica de Honda en Swindon y de la planta de Ford en Bridgend son dos ejemplos de ello, de hecho, la producción de coches cayó un 14% en Reino Unido en el año 2019. Pero el Acuerdo de Comercio y Cooperación