Elon Musk y Tesla llevan años vendiendo las bondades de su sistema de conducción autónoma, su famoso y controvertido Autopilot, que ha sido puesto varias veces en entredicho. En ciertas ocasiones las quejas versaban sobre promesas incumplidas o supuestas exageraciones sobre sus capacidades.
En otras ocasiones, se le ha señalado por los fallos y los incidentes que ha provocado esta herramienta, situaciones que han motivado diversas investigaciones a ambos lados del Atlántico. Este desarrollo vuelve a estar en el punto de mira después de la filtración de más de 23.000 correos electrónicos, una de las fugas más grandes que ha sufrido la compañía en toda su historia.
Se destapan los fallos más secretos del Autopilot de Tesla
Tesla siempre ha defendido ‘a capa y espada’ el buen funcionamiento de su sistema de conducción autónoma Auto Pilot. Si bien, es cierto que no ha estado exento de polémica por algunos casos sonados en los que el sistema no ha funcionado como debería, la filtración de 100 GB de datos sobre la marca ha dejado a Tesla en duro aprieto.
Una filtración que también ha destapado un uso de los datos de los clientes fuera de lo común. Más concretamente, habrían recopilado diferentes datos personales no sólo de los propios clientes, sino de empleados también, algo que está prohibido en Europa.Suscríbete a nuestro canal de Youtube
Las revelaciones supondrían una nueva presión para la empresa por parte de los organismos reguladores, que deberán analizar los informes en busca de pruebas de que con su Autopilot, Tesla ha engañado a las autoridades o a los clientes sobre la seguridad de sus vehículos.
Tesla podría haber engañado a los clientes sobre la seguridad de sus coches
Así, la alardeada tecnología de conducción autónoma de Tesla y el Autopilot podría estar muy lejos de ser lo suficientemente segura para circular, y parece