Toyota se ha convertido en la marca que más coches ha producido a lo largo de 2023. En el primer semestre del año ha conseguido vender un total de 5,4 millones de vehículos, así que se esperaba que el año terminara con números de récord. Pero agosto se ha convertido en un mes nefasto para la compañía. Después de sufrir las consecuencias de un incendio en la fábrica de un proveedor de elementos para sus coches en Kolin, en la República Checa, que paralizó la planta que tiene en este país, el día 29 de agosto tuvo que parar toda su producción en Japón.
En el momento de escribir este artículo, el día 30 de agosto, todavía no se ha retomado la producción y no se sabe cuando se podrá comenzar de nuevo la fabricación de los coches en las fábricas de Toyota en Japón. El motivo por el que las 14 plantas que Toyota tiene en Japón han paralizado su producción ha sido un fallo informático, en el que los ingenieros de la marca están trabajando sin descanso para resolverlo.
Se descarta un ataque informático
El fallo en concreto parece estar en el sistema que utilizar Toyota para reducir costes en la fabricación de sus modelos. Con este sistema, solicitan solo las piezas que necesitan en cada momento, evitando el stock de piezas y reduciendo el coste de almacenamiento.
Al parecer, se trata de un fallo producido en ese sistema, aunque se ha descartado, en principio, un ataque informático provocado. La manera de funcionar de este sistema ha provocado una caída en cascada de todas las plantas, aunque se ha detectado que el inicio del problema proviene de dos plantas de la marca. Al estar conectadas, ese fallo se ha extendido al resto de plantas y las 14 fábricas de Toyota en Japón han sufrido sus consecuencias.
Coincidiendo con la presentación de sus nuevos Land Cruiser 300 y Land Cruiser 250, Toyota ha presentado una edición moderna de su emblemático Land Cruiser 70
La paralización de la producción afecta a Toyota de manera considerable, ya que la producción diaria de la marca en esas 12 fábricas es de 13.500 unidades al día. Es decir un tercio de la producción total de Toyota. Esto incluye los modelos bajo la enseña Lexus, la marca premium de Toyota.
Por el momento, se prevé unas pérdidas de varios millones de dólares en producción y todo va a depender en cuánto tiempo tarden en localizar el problema exacto, solucionarlo y asegurar la producción de forma segura para que no vuelva a repetirse algo similar.