Desde hace varios años, Ducati pertenece al grupo Volkswagen y por ello ha realizado varios homenajes a modelos de Lamborghini, por ejemplo. Pero ahora va un poco más allá y ha puesto su mirada en los modelos de Bentley. En concreto, ha sido en el Bentley Batur y ha trabajado sobre una Ducati Diavel V4.
La colaboración entre ambas marcas ha propiciado la creación de la Ducati Diavel for Bentley. Se ha conseguido una motocicleta que une la elegancia de este modelo de Bentley, una obra de artesanía en dos ruedas, un rendimiento sobresaliente y desde luego, la exclusividad que busca cualquier persona cuando se fija en un Bentley.
En la carrocería de la Ducati Diavel for Bentley se puede ver el color Scarab Green que está disponible en el catálogo de colores de Bentley. Se incluyen además dos tomas de aire con dos tonos y unos escapes muy similares a los que utiliza el coche. El asiento es para una sola persona, pero se puede añadir una segunda plaza en la zona trasera. El recubrimiento de Alcántara negro ayuda a que presente una imagen muy atractiva.
La carrocería tiene bastantes elementos de fibra de carbono, así que se puede hablar de un peso bastante liviano, teniendo en cuenta esta característica. El modelo va a ser bastante exclusivo, porque solo se van a fabricar 500 unidades. Pero para quien quiera algo más de picante al resultado, se fabricarán 50 unidades más, denominadas Ducati Diavel for Bentley Mulliner.
Estas unidades estarán orientadas a clientes de Bentley Mulliner y tendrán opciones personalizadas para que su moto sea mucho más personal y diferenciada. La clave de esta opción es que se puede pintar la carrocería de la moto para que haga juego con la del coche.
En ambos casos, la Ducati Diavel for Bentley y su variante Mulliner, están propulsadas por un motor GranTurismo V4 de 1.2 litros, que ofrece una potencia de 168 CV. Es bastante similar en cuanto a la experiencia al motor del Bentley Batur, salvando las distancias que presenta una moto frente a un coche de estas características.
El precio de esta motocicleta no será nada barato, ya que la versión estándar comenzará su precio en unos 48.000 euros, mientras que la versión Mulliner ascenderá hasta superar los 85.000 euros. Eso sí, ambas tendrán complementos personalizados, como son una caja de entrega de madera y una funda para la motocicleta, además de un certificado de autenticidad.