El transporte pesado por carretera quiere abandonar también los motores de combustión. Sin embargo, se enfrenta a un reto bastante importante. Si los coches eléctricos se están viendo frenados por la falta de infraestructuras, los camiones eléctricos tienen todavía más problemas. Los grandes camiones con batería están equipados con grandes y pesados acumuladores, que necesitan periodos de carga muy elevados.
Por eso, se está trabajando para facilitar este proceso y buscando una manera rápida para recargar las inmensas baterías que guardan en su interior. Hace cuatro años, se anunció que se iban a desarrollar estaciones de carga para camiones que podrían tener una capacidad de hasta tres megawatios de potencia.
El conector MCS (Megawatt Charging System) ya ha comenzado a prestar servicio y quiere convertirse en el estándar que sea el que mueva a los camiones eléctricos. El objetivo es que se pueda recuperar hasta el 80% de la capacidad de la batería en los tiempos de descanso, sin necesidad de tener que esperar demasiado tiempo para conseguir la suficiente carga para continuar con el viaje.
Las empresas ABB Mobility y MAN Truck & Bus han presentado el cargador MCS y han aprovechado para mostrar sus capacidades. Esta prueba ha conseguido cargar la batería de un camión eléctrico con una potencia de 700 kW a 1.000 amperios, un hito que facilita mucho el trabajo de los conductores de estos camiones eléctricos.
Por el momento, todavía está en pruebas en las instalaciones de MAN en Munich. Este prototipo válido ha conseguido duplicar el amperaje y la capacidad de carga en pocos años. Con estos resultados, el objetivo se centra en conseguir 30.000 puntos de carga CMS en toda Europa, con 4.000 de ellos en Alemania.
La técnica hace posible que estos cargadores generen una capacidad de carga de hasta 3,75 MW a 3.000 amperios. Una vez obtenida la cifra propuesta en esta prueba, 700 kW, se espera que se consiga superar 1 MW para que este se convierta en el estándar para la carga de baterías de camiones en toda Europa.
La compañía, que tiene bastantes estaciones de carga rápida en Europa, comienza su expansión por España con una estación de carga.
Los cargadores más potentes en la red europea ofrecen un máximo de 400 kW a 500 amperios, así que esto supone un avance considerable para ofrecer servicio a los camiones eléctricos. Eso sí, la instalación de las estaciones de carga CMS van a requerir cambios en la red eléctrica, ya que necesitan una gran cantidad de energía.
Esto hará que los gobiernos europeos tengan que darse prisa para actualizar su red de suministro eléctrico. En pocos años, esta debería ser capaz de aguantar la demanda de los cargadores estándar y los destinados a los vehículos comerciales pesados.
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