El Nissan Kicks es el modelo más pequeño que la marca nipona vende en EEUU. Cuando creó la primera generación a sus fieles no les gustó mucho pero rápidamente se dieron cuenta que era un modelo muy versátil. En sí, estamos ante una versión vitaminada del Juke que se vende en Europa aunque con importantes cambios. El más top es que su diseño es más rudo y musculoso aunque tampoco podemos obviar otros apartados de su estilo y técnica…
Ahora, tras más de un lustro a la venta, ve la luz la segunda generación del Nissan Kicks. En esencia estamos ante un modelo más del gusto del cliente yanqui y esto no hay más que verlo en su diseño. Su técnica también es diferente a lo que estamos acostumbrados a ver en Europa pues en este país los híbridos y eléctricos (excepto Tesla y Rivian) son contados. Toma nota de este modelo porque Nissan ha creado un producto que bien podría gustar aquí…
El diseño del nuevo Nissan Kicks es más anguloso y macizo… pero su interior sigue las últimas corrientes tecnológicas…
Si el anterior Kicks pecó de ser «suave» ahora luce un frontal más vertical y macizo. El ejemplo lo tenemos en que ya no luce la parrilla «V-Motion» de la marca. Este recurso estético queda oculto en las lamas horizontales de su nueva parrilla, la misma que sitúa en los extremos en forma de cascada la iluminación LED diurna. Por su parte las ópticas principales quedan muy arriba justo en el borde superior de la parrilla y bajo el capó de líneas cinceladas.
Es en la vista lateral donde más se nota, de forma velada, la influencia del Juke europeo. La forma del capó y las líneas de tensión que recorren los pasos de rueda recuerdan al B-SUV fabricado en Sunderland. Amén