El fabricante sueco, ahora bajo control del gigante chino Geely, ha comenzado a trasladar la producción de sus vehículos eléctricos a Bélgica desde China. Es más, según el reporte que hace referencia a esta información, Volvo se dispone a iniciar la producción del buque insignia de la marca, el EX90, también en este país. Todo apunta a que este movimiento de la compañía se debe al más que probable incremento de los aranceles a pagar por la importación de vehículos procedentes de China en la Unión Europea.
Fue ya el otoño pasado cuando Volvo anunció que a partir de 2025 producirá su nuevo SUV compacto EX30 en la planta belga de Gante. En ese momento, la compañía justificó la decisión dando como argumento la mayor flexibilidad y capacidad para adaptarse a las demandas de sus clientes europeos. Aunque, en el fondo, el previsible incremento de los aranceles en Europa tuvo ya entonces un gran peso en esta decisión.
Según algunos medios, el período de tiempo que pase entre la implantación de los nuevos aranceles y el inicio planificado de la producción en Bélgica este próximo año podría ser bastante problemático para la compañía. Si finalmente se impusieran los aranceles más altos, Volvo podría incluso tener que detener la importación de nuevos vehículos a la Unión Europea. Se espera que una vez celebradas la Elecciones Europeas 2024 de este pasado 9 de junio, las autoridades comunitarias anunciarán esta misma semana la cuantía de los nuevos aranceles, si es que estos se modifican, como parece que ocurrirá. Según los últimos rumores no confirmados, el nuevo arancel para los vehículos procedentes del mercado chino rondará el 25 o el 30 por ciento.
Europa sigue los pasos de Estados Unidos en la imposición de aranceles a los vehículos chinos
Hasta ahora, solo se conocían dos ubicaciones dedicadas a la producción del Volvo EX90: Ridgeville en Carolina del Sur y Daqing (Heilongjiang) en China. La producción en Estados Unidos comenzó la semana pasada, tal y como te contamos aquí mismo en HighMotor, mientras que la producción en China comenzará a finales de este mismo año.
Aunque, como ya hemos comentando, Volvo es propiedad del gigante chino Geely desde 2010. Lo cierto es que la compañía ha mantenido durante todo este tiempo su independencia a la hora de tomar ciertas decisiones. Así, por ejemplo, la compañía decidió importar inicialmente unidades del EX30 desde China para el mercado europeo, hasta el inicio de su producción en la planta belga de Gante. Está por ver, no obstante, si la compañía podrá seguir importando este SUV compacto desde el mismo momento en el que se comiencen a aplicar los nuevos aranceles a los vehículos importados desde China.
El Volvo EX30 está disponible en Alemania, actualmente, desde 35.490 euros. Lo que se desconoce, por el momento, es si este precio se mantendrá o no una vez que las unidades que se comercialicen en Europa ya no provengan de la planta china de la compañía donde, en principio, los costes laborales deberían ser menores.