Tendríamos que dar las gracias a BMW por seguir comercializando un coupé deportivo lo más puro posible, el Serie 2, un modelo que en su última generación entra en la mitad de su ciclo y por lo tanto es hora de que reciba un pequeño restyle y cuando pequeño es que es pequeño, porque tendrás que tener el ojo bien entrenado para darte cuenta de los cambios.
Al menos en lo que se refiere a nivel estético, un apartado en el que BMW apuesta por su cara más deportiva desde la versión de entrada a la gama, algo que consiguen incluye de serie el acabado M Sport. Esto se traduce en la incorporación de acabados cromados en la parrilla, faldones pintados en el mismo color de la carrocería y una moldura en acabado negro brillante en el difusor trasero; con mención a parte del M240i xDrive que al tratarse del escalón previo al M2 tiene una estética más cercana a su hermano mayor.
BMW ofrecerá para la carrocería del Serie 2 una paleta de dos colores sólidos y siete metalizados, pudiendo además pintarlo en los colores Fire Red y Skyscraper Grey, ambos metalizados que se encuentran disponibles por primera vez para este modelo. La versión M240i xDrive también estrena un color en exclusiva, se trata del Zandvoort Blue. De serie incorpora llantas acabado M de 18 pulgadas las cuales podremos sustituir por otras de 19 pulgadas con nuevos diseños M o BMW Individual en distintos acabados.
En el interior del nuevo BMW Serie 2 tampoco tendremos cambios excesivos y estos siguen la línea de los otros restyle que la marca ha aplicado en los últimos meses al resto de sus modelos. De esta manera el grueso de ellos se centran en su sistema BMW Curve Display, compuesto por una pantalla de 12,3 pulgadas para el cuadro de instrumentos y otra de 14,9 pulgadas para el sistema de infotretenemiento, con la que podremos manejar más funciones al eliminar los botones correspondientes de la consola central.
Hay otros cambios en el interior que podemos considerar menores, como la introducción de una nueva iluminación ambiental LED en cascada que se integra en las propias salidas de aire situadas en el salpicadero. También tenemos un nuevo volante de cuero M de corte deportivo achatado en su parte inferior y con una nueva disposición para los radios centrales; nuevos asientos M Performtex con una innovadora tapicería de terciopelo o la nueva gama de molduras opcionales que tendremos para el interior con acabado desde madera noble a la fibra de carbono.
La gama mecánica del BMW Serie estará compuesta en el lado diésel por una única opción, reservada para el 220d con tecnología mild-hybrid de 48 V que proporciona 11 CV adicionales a los 190 CV que entrega esta motorización. Así las motorizaciones importantes son gasolina, comenzando por la versión de acceso 218i con 156 CV; seguido del 220i que se queda en los 184 CV; saltando ahora al 330i donde la cosa ya se pone seria con 245 CV para llegar al último escalón previo a un M2, se trata del M240i xDrive que deja la potencia fijada en 374 CV con su bloque de seis cilindros en línea y 3.000 CC. Todas las motorizaciones tienen en común que usarán la transmisión automática Steptronic 8 velocidades y la suspensión deportiva M.