A lo largo de la historia de la F1 ha habido muchos tipos de suspensiones, desde algunas bastante primitivas hasta las primeras suspensiones con muelles, pasando por las electrónicas o activas que conseguían grandes ventajas, etc. Aquí me quiero centrar en los dos esquemas o geometrías de suspensiones de un F1 más utilizadas en la actualidad.
Así podrás conocer por qué los equipos eligen una u otra y cuales son sus ventajas y desventajas, aunque los avances han hecho que cada vez sean más iguales…
Pull rod vs push rod
En la F1, entre otras categorías del motorsport, existen dos geometrías de suspensión básicas, y que luego cada equipo trata de optimizar según dónde pone los anclajes de cada una, los carenados con fines aerodinámicos que usan en sus tirantes, o triángulos, etc. Y estas geometrías son:
Suspensión Push Rod: el brazo de suspensión se conecta a la rueda en un punto bajo y la barra de empuje (push rod) se conecta al brazo y a un punto alto en el chasis. En este caso, los elementos de la suspensión, como el pistón, muelle, etc., se sitúan en una parte más elevada del chasis, dentro del morro. En cuanto al funcionamiento, al comprimirse la suspensión, la rueda empuja el brazo hacia arriba, lo que a su vez empuja la barra conectada al damper o amortiguador como tal. Al comprimirse el muelle, almacena energía en forma elástica y luego la aportará empujando la rueda hacia abajo cuando el pavimento lo permita, manteniendo así el contacto del neumático con el asfalto y amortiguando los baches.
Suspensión Pull Rod: en este otro caso los componentes de la suspensión se ubican en la parte inferior del chasis. El brazo de suspensión se conecta a la rueda en un punto alto y la barra de tracción (pull rod) se conecta