No es nada nuevo para todo aquel que es ya propietario de un vehículo eléctrico el hecho de que el proceso de recarga puede acabar siendo una experiencia frustrante en algunas ocasiones, en función de la red de recarga elegida. La obligación de emplear múltiples aplicaciones móviles para identificarse en cada una de ellas y llaves NFC que luego fallan, o puntos de carga que no funcionan y obligan a desplazarse a otro para probar suerte de nuevo, son desgraciadamente situaciones habituales para algunos conductores de vehículos eléctricos.
Revel, una compañía estadounidense con base en Brooklyn, cree tener la solución a todos estos problemas. Aliándose con Juice, una startup de visión computacional de California, ambas compañías han desarrollado lo que denominan como el «Face ID para vehículos«.
Según explica Revel en su comunicado de prensa, Juice utiliza IA y visión computacional para identificar el vehículo de cada usuario, iniciar sesiones de carga y completar pagos sin necesidad de interactuar con dispositivos de pago físicos o aplicaciones. En definitiva, se trata de algo similar a la tecnología Plug&Charge que ya implementan muchos puntos de carga, pero en este caso no es el vehículo el que se identifica a través del intercambio de datos al conectar la manguera, sino que es el propio punto de carga el que reconoce e identifica visualmente al vehículo; con las ventajas que ello supone, ya que no es necesaria la compatibilidad con Plug&Charge que suele ser limitada.
«Esta asociación demuestra cómo la carga de vehículos eléctricos puede ser tan fluida como desbloquear tu teléfono con tu rostro. Solo las experiencias verdaderamente simples ayudarán al mundo a moverse hacia el transporte sostenible a gran escala».
Así de fácil
Para registrarse en la red de carga de Revel, los propietarios de un vehículo eléctrico deben tomar fotos de su vehículo y añadir un método de pago. La tecnología de Juice ya está activa en las estaciones de carga actuales de Revel, que actualmente se reparten en tan solo tres ubicaciones en Nueva York con un total de 54 puntos de carga, pero la compañía planea expandirse por todo el país paulatinamente a lo largo de los próximos meses.
Revel confía en poder ofrecer así una experiencia de carga a todos los propietarios de un vehículo eléctrico similar a la que ofrece Tesla con su red de Supercargadores, hasta hace poco limitada en exclusiva a sus propios vehículos. Los propietarios de un Tesla solo tienen que conectar la manguera y pueden olvidarse de todo hasta que la recarga ha concluido. Es el vehículo el que se identifica en la red de Tesla y el propio sistema el que se encarga de aplicar el cargo correspondiente para realizar el pago. El propietario de un Tesla lo único que tiene que hacer es conectar la manguera.
Esta experiencia sin complicaciones ha sido difícil de alcanzar para las redes de recarga de otros proveedores, debido a la necesidad de comunicarse con muchos tipos diferentes de vehículos. La tecnología Plug&Charge se presenta como una posible solución, sin embargo, la alternativa que ofrece Revel en sus puntos de carga de la mano de Juice tiene la ventaja de que es independiente de la marca del vehículo eléctrico y funciona con todos ellos, ya que no requiere la integración de la tecnología Plug&Charge por parte de los fabricantes.