En la saga cinematográfica de James Bond solemos asociar de manera casi automática a Aston Martin como marca principal al tratarse de la favorita del agente 007, aunque en películas en donde se mezcla la acción, el glamour y cuyo protagonista es británico no podía faltar otra de las principales y reconocidas marcas británicas, es decir, Rolls-Royce.
En dicha franquicia de películas Rolls-Royce ha aparecido en doce ocasiones, entre ellas en la mítica Goldfinger de 1964 con Sean Connery ejerciendo el papel del agente 007. Esta cinta situada entre las reseñables de la saga celebra en este año su sesenta aniversario, una película en la que el vehículo del antagonista (Auric Goldfinger interpretado por Gert Fröbe) es nada menos que un Rolls-Royce Phantom III Sedanca de Ville de 1937 y que la marca homenajea, con guiños a escenas de la película incluidas, a través de este Phantom Goldfinger que será entregado a un importante cliente y coleccionista inglés de Rolls-Royce.
El exterior único de este Rolls-Royce Phantom Goldfinger recuerda sin lugar a dudas al Phantom III Sedanca de Ville presente en la película, con una pintura bitono en la que se recrea a la perfección el tono amarillo del protagonista de 1937 combinado con el negro que cubre el capó, el techo, el maletero y el parachoques trasero. Las llantas de 21 pulgadas también están acabadas en negro y cuentan con detalles en plateado, otro guiño a las llantas del Phantom III. La primera referencia concreta a la película la tenemos en el Spirit of Ecstasy, creado con plata maciza e incrustaciones colocadas estratégicamente de oro de 18 quilates pareciendo que estuviera escondido, y es que Auric Goldfinger contrabandeaba con oro escondido en los paneles de las puertas de su Rolls-Royce.
Si nos vamos ahora al interior del Phantom Goldfinger, veremos que se encuentra acabado en cuero Navy y chapa Royal Walnut, ambos elementos elegidos especialmente para resaltar a propósito los detalles dorados como las costuras o las letras «RR» situadas en los reposacabezas. A partir de aquí nos encontraremos con referencias a la película como, por ejemplo, su techo Starlight en el que 719 «estrellas» recrean en un sutil tono dorado como estaban situadas las constelaciones el último día de rodaje el 11 de julio de 1964 de la mítica escena en el Furka Pass suizo.
Como referencia a la obsesión de Auric Goldfinger por el oro tendremos numerosos detalles por el habitáculo que han sido recubrimientos en oro de 18 y 24 quilates como son las rejillas de ventilación, la placa VIN con un número de identificación que se pudo elegir en específico y acaba en 007, los altavoces, la consola central y, ojo a esto, se creo una especie de bóveda oculta entre los asientos delanteros adaptada para ocultar un lingote de oro que presenta la forma Phantom «Speedform», que no es más que una representación en miniatura del diseño del automóvil. En la parte interior de la tapa de la guantera también se encuentra grabada una cita de Auric Goldfinger.
Nuevamente otra referencia al Furka Pass aparece en el chapado frontal tridimensional que muestra los contornos de este puerto suizo, el cual ha sido creado a través de acero inoxidable que fue sometido a un proceso de oscurecimiento llamado deposición física de vapor, un minucioso trabajo que requirió un año de trabajo para crear diez prototipos de los que se extrajo el diseño final. Otro mapa lo encontramos en las mesas y esta vez es de Fort Knox, el depósito de lingotes donde se almacenan las reservas de oro de los Estados Unidos, creado a través de una incrustación de solo 0,1 mm de profundidad y bañado en oro de 22 quilates, trabajo que tardó seis meses en finalizarse.
Para encontrar las últimas referencias a la película tenemos que irnos a la zaga. Al abrir el maletero el logotipo de 007 se proyecta sobre el suelo del propio maletero, un dispositivo que se inspira en un aparato electrónico de seguimiento que James Bond instala en el Phantom de Goldfinger. Una vez abierto el maletero por la parte interior de la puerta puerta se encuentra una réplica del palo de golf usado por Goldfinger cuando reta a Bond en su primer encuentro a una partida, incluyendo además las iniciales «AG», las mismas del anillo de Goldfinger. También se han equipado unos paraguas en los mismos colores que los que porta en una escena Oddjob, el ayudante de Goldfinger y, para terminar, se ha conseguido que porte la misma matrícula británica «AU 1» del Phantom III de la película.