El RACE ha dado a conocer los datos de un análisis realizado a conductores españoles, a través de un observatorio creado para este fin y con el nombre de DUCIT. Los datos son demoledores a tenor de los resultados extraídos de los testimonios de los conductores participantes, y es que el mantenimiento, las reparaciones, el gastos en peajes y seguros se han convertido en la principal fórmula de ahorro para capear la crisis económica sin renunciar a nuestro coche, que en el grueso de los casos es parte fundamental de nuestro día a día.
España: parque móvil envejecido y preocupantemente descuidado
Mientras sólo se incentiva la compra de vehículos, el parque automovilístico español sigue envejeciendo, contaminando más y siendo menos seguro
Desde que comenzaron los primeros síntomas de esta profunda crisis económica, el sector del automóvil ha sufrido importantes varapalos, teniendo como único refuerzo la implantación de ayudas a través de los planes PIVE que ya van por su sexta edición. Aún así, el deterioro del parque automovilístico, junto con el preocupante aumento de la edad media del mismo, comienza a tomar tintes alarmantes.
La realidad es que el coche es, para un importante porcentaje de la población, una herramienta más de trabajo. Por ello, ante una situación difícil repleta de recortes salariales e incertidumbre laboral, pagar para realizar los mantenimientos preventivos y correctivos, junto con los impuestos, seguros, etc. ha pasado a un segundo o tercer plano en cuanto a prioridades.
No seré el único que ha escuchado aquello de “pago gasolina, y porque si no ni arranca”, demostrando que nuestro automóvil está sufriendo muy duramente lo ajustado de nuestra economía doméstica actual. Esta situación, lejos de encontrar medidas resolutivas por parte de las administraciones, tan sólo ve cómo se implantan más medidas de tintes recaudatorios, para penalizar a aquellos que tienen un coche