Hace unos meses llegaba a mi garaje, desafortunadamente sólo para unos pocos días, el nuevo BMW M235i. Sobre el papel uno de mis BMW favoritos, en la práctica un confirmado romance. Deportivo, aunque sin hacer enormes alardes de ello, un bonito diseño exterior, una buena atmósfera interior, un 6 cilindros bajo el capó, tracción trasera… sí, me gusta, y mucho, el BMW M235i, un BMW M235i que se ha encargado de dejarme con unas ganas terribles de conocer ya (y por supuesto conducir) a ese futuro BMW M2 del que tanto hemos hablado en los últimos meses.
En un bonito rojo intenso que no le podía sentar mejor, sólo roto por el tono grafito de sus llantas y retrovisores y unas pinzas de freno azules con el logo de BMW Motorsport, se presenta ante mi a las puertas de las oficias de BMW un bonito M235i. Había conducido semanas antes un BMW 220i que ya había sido capaz de dejarme muy satisfecho… ahora tocaba dar el salto al BMW Serie 2 bendecido con la insignia de la ///M.
La relación era a tres bandas. Mi compañero David Villarreal se iba a encargar de la prueba, que pudisteis leer en Diariomotor Altas Prestaciones (en el artículo “BMW M235i Coupé: con seis cañones por banda”), pero el “pequeño M” iba a pasar conmigo también unos días…
ESPECIFICACIONESMotor L6 Turbo, 2.979 cm3
Potencia 326 CV @5.800 rpm
Par máximo 450 Nm @1.300 rpm
Velocidad máxima 250 km/h
Peso 1.530 kg