El Tesla Model S ha superado el trámite y ha logrado alcanzar las cinco estrellas en las pruebas de EuroNCAP, la máxima calificación que se suma a la ya obtenida en su tierra, en las pruebas de la NHTSA. El Model S sería uno de los pocos modelos que habrían conseguido la máxima calificación en las pruebas de seguridad elaboradas en Europa y en Estados Unidos, lo cual, aunque parezca extraño, no es nada sencillo. Hay que tener en cuenta que la filosofía de la NHTSA y de EuroNCAP difiere en algunos aspectos fundamentales. De manera que, si bien es cierto, es relativamente sencillo conseguir la máxima puntuación de uno de los dos organismos, conseguirlo de ambos a la vez se complica en tanto Estados Unidos y Europa ofrecen una consideración diferente de aspectos fundamentales de la seguridad de un automóvil.
El Tesla Model S habría demostrado ser un coche extraordinariamente seguro todos los aspectos, tal y como acreditan sus resultados, algo que a la compañía de Elon Musk le servirá para sacar pecho, especialmente tras la mala publicidad que se intentó transmitir en un tiempo por el temor infundado a incencios.
Que la seguridad de un coche esté suficientemente preparada como para alcanzar la máxima calificación de seguridad en las dos orillas del Atlántico, no siempre es sencillo, lo cual se debe a la menor o mayor importancia que conceden EuroNCAP y NHTSA a diferentes aspectos de la seguridad de un automóvil.
La berlina eléctrica que está en boca de todos ha conseguido sus ansiadas cinco estrellas en las pruebas realizadas en las dos orillas del Atlántico, algo que en su día ya habrían conseguido también el Volvo S60 y el Volvo V60. Las pruebas NHTSA conceden mayor importancia a la rigidez estructural y a la resistencia de los elementos de seguridad