Olvida por un momento lo que imaginas que debería ser lo habitual en un coche, aspectos tan básicos como que su carrocería sea de metal. En un futuro, quizás no tan lejano, conduciremos coches de aspecto biónico, con materiales inéditos hasta la fecha, más ligeros, más sostenibles y óptimos no solo en términos de peso y coste, sino también aerodinámica. En su papel visionario, EDAG vuelve a sorprendernos con un prototipo que gozará de una carrocería revestida de un material textil. Es el EDAG Light Cocoon y se presentará en el Salón de Ginebra de 2014.
Hay razones de peso, y nunca mejor dicho, para que los coches en un futuro próximo cuenten con revestimientos textiles en su carrocería. También hay razones aerodinámicas.
¿Y por qué una carrocería textil? En los últimos años hemos visto prototipos que utilizaban esta piel exterior con diferentes propósitos. El BMW Gina Concept transformaba por completo su apariencia y la carrocería textil era la clave para adaptar su apariencia a la conducción que practicasemos, a los requisitos aerodinámicos de cada momento. El Peugeot Exalt Concept también abordó el problema aerodinámico con un revestimiento inspirado en la piel del tiburón, para recrear sus aptitudes hidrodinámicas – y por ende, aerodinámicas.
En el EDAG Light Cocoon, al menos de momento, no se ha hecho demasiado hincapié en su función aerodinámica, pero sí en el hecho de investigar procesos de construcción sostenibles y el máximo aligeramiento. EDAG ha recurrido a Jack Wolfskin – te sonará como fabricante de ropa de abrigo – para diseñar una cubierta textil impermeable y extremadamente ligera. Su densidad es de 19 g/m2. Eso significa que – haciendo unas cuentas rápidas – este recubrimiento textil sería cuatro veces más ligero que el papel empleado habitualmente en oficina, el típico DIN A4 de 80 gramos.
EDAG quiere ir más