Rusia tiene un serio problema. Las víctimas en accidentes de tráfico son demasiadas. En 2012 murieron más de 28.000 personas en accidentes de tráfico, un dato escalofriante comparado con las 1.131 personas que fallecieron en España en 2014, que ya son de por sí demasiadas. Manejando tales cifras está claro que hay que hacer algo por reducir la tasa de mortalidad y en Rusia se han puesto manos a la obra con medidas cuanto menos controvertidas.
Se van a retirar licencias de conducir a personas que se consideren “enfermas”. En ese grupo de personas se engloban los transexuales, travestis y asexuales. También serán privados de conducir otros individuos con “desordenes mentales”, tales como los exhibicionistas, fetichistas, voyeurs, ludópatas y cleptómanos. Los esquizofrénicos, quienes tengan enfermedades hereditarias en la vista, o diagnóstico de depresión también deberán acostumbrarse a ir a pie o en autobús. Quien mida menos de 1,5 metros de estatura tampoco podrá ponerse al volante.
El gobierno Ruso defiende este acto discriminatorio asegurando que eliminando de la circulación a personas distraídas o con “discapacidades” se reducirá el número de accidentes de tráfico. Asociaciones rusas en defensa de los derechos humanos pretenden recurrir estas prohibiciones y buscan apoyos internacionales contra estas vulneraciones de los derechos y la integridad de las personas.
La agrupación de conductores profesionales del país es una de las pocas en haber respaldado públicamente estas medidas del gobierno, al considerar que ayudan a reducir la siniestralidad en las carreteras.
Fuente – USA Today
El artículo Rusia prohibe conducir a transexuales, cleptómanos, gente de pequeña estatura… ha sido originalmente publicado en Actualidad Motor.