El objetivo número uno de la policía es velar por la seguridad ciudadana. Y es en seguridad por lo que más apuesta Volvo a la hora de dar vida a sus automóviles. Entonces, ¿por qué no juntarlos? Es lo que ha debido de pensar la Policía Federal de Australia al escoger un miembro de la casa sueca para probar si está preparado para desempeñar tal oficio.
El escogido, nada más y nada menos que el Volvo S60 T6 R-Design, toda una berlina con genio y carácter. El elegante S60 se convierte en una fiera de la carretera en esta versión que nos enseña una cara muy deportiva y un corazón, igualmente radical. Además, esta alternativa ha pasado por las manos de Polestar.
El resultado, un policía diferente. Bajo el capó, más de 300 caballos de potencia. Y es que, se trata del motor sobrealimentado de 3,0 litros de cubicaje que consigue desarrollar un total de 329 CV y 480 Nm. Para gobernar tanta bravura, una tracción a las cuatro ruedas que mantiene el coche pegado al asfalto cual chicle de menta.
Por supuesto, la cubierta de este peculiar Volvo S60 se viste de uniforme. La berlina exhibe vinilos que hacen referencia a su profesión, una barra de luz azul en el techo y una sirena. En el interior, han colocado una radio como no podía falta en todo buen coche patrulla.
Rod Anderson, sargento de este cuerpo de seguridad autraliano, decía: “Estamos particularmente interesados en las opiniones de nuestros funcionarios sobre las capacidades de la tracción a las cuatro ruedas del S60 y en las ventajas que puede ofrece a nuestra flota de tracción trasera actual.”
Este Volvo S60 T6 R-Design estará varios meses de prueba hasta que decidan si se convierte en todo un policía.
Fuente – Polestar
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