Sí amigos, todo es diferente en Rusia. En el país del comunismo de mercado – ¿o eso era China? – el exceso es el rey. Es el lugar de origen de fabricantes como Dartz, que sorprenden a propios y extraños con propuestas de negocio… diferentes. Primer fue un asiento recubierto de piel de pene de ballena, luego fue un todoterreno cubierto de pan de oro, y ahora es una sillita infantil blindada. Blindada, forrada en piel de cocodrilo y equipada con un sistema de infoentretenimiento. Dartz no ha cambiado en absoluto.
Empezamos bien: su nombre es “l’Enfante Terrible”.
Su departamento de marketing tiene las cosas claras. “No entendemos por qué un coche que cueste más de 100.000€ puede montar sillas infantiles que cuesten menos de 500€”. Así que ni cortos ni perezosos, han fabricado una silla de alto nivel que encajará tan bien en un Dratz Prombon como en un Mercedes G 65 AMG. Dartz ha construido esta silla con una estructura de kevlar, capaz de protegerlo de disparos de armas de gran calibre. Imaginamos que el target son mafiosos rusos y dictadores con hijos.
Parte de su estructura se ha fabricado en fibra de carbono, por ningún motivo aparente. No es que optimizar la relación peso potencia de un Clase S blindado sea prioritario. El asiento está recubierto de piel auténtica de cocodrilo, que ha sido teñida en tonos dorados y rojos. Donde no hay piel de cocodrilo hay cuero italiano cosido a mano, formando patrones en forma de diamante. Pero no hay inserciones en oro o plata, quizá piensen en lanzar un modelo mejorado el año que viene. Un grabado de l’Enfante Terrible adorna el reposacabezas.
Imaginamos que el target son mafiosos rusos y dictadores con hijos.
La cosa no termina aquí. El asiento equipa funciones de masaje similares a las de