Sin duda uno de los dichos más afortunados que existen es el de que para gustos, colores. Y es que, por ejemplo, el Nissan Juke, uno de los reyes del segmento B-SUV y junto al Qashqai la pareja perfecta para la marca japonesa, es un modelo que a mi ojo no es demasiado agraciado. Quizás, precisamente ese punto que lo hace diferente del resto es la clave de su reinado. Pues bien, su segunda generación está en camino y la marca acaba de anunciar que invertirá 100 millones de libras en la fabrica que le da vida, la planta de Sunderland, en Reino Unido.
En el pasado mes de julio, Nissan anunciaba la ampliación de esta fábrica con el objetivo de aumentar la producción y abastecer de este modo la demanda. Una factoría de la que, al año, salen unas 500.000 unidades que, en su mayoría, se exportan a diferentes países. Ahora el mismo fabricante publica que inyectará unos 135 millones de euros en la misma planta para prepararla ante la inminente llegada de la segunda generación de uno de sus todocaminos estrella, el Nissan Juke.
Este anuncio garantiza los más de 34.000 puestos de trabajo que mantiene la fábrica hasta al menos el final de la década. Según parece, la renovación del modelo no llegará hasta el segundo semestre del próximo año esperando que a principios de 2016 comencemos a ver algún adelanto en forma de concepto. Por supuesto conservará esa línea extravagante que le ha dado fama poniendo especia cuidado en el interior, habitáculo que ganará en calidad.
Poco más sabemos sobre la próxima edición del Nissan Juke, aunque estamos intrigados por saber de lo que son capaces.
Fuente – Nissan
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