Vuelve el mítico trazado del circuito Hermanos Rodríguez a dar cobijo a una carrera de Fórmula 1 y acoger el GP de México de 2015. Tras años, el trazado ha sido remodelado y suavizado para quitar el peralte y hacerlo más seguro, pero también menos emocionante. Aunque las características del asfalto parece que darán la emoción que falta, con un asfalto muy aceitoso y resbaladizo. En contra están los comisarios de pista, que parecen poco rápidos en realizar su trabajo.
La pista estaba algo húmeda, nada que ver con el GP de Estados Unidos, pero los coches han tenido salidas de pista, trompos y problemas para mantener la trazada. Muchos pilotos se han quejado de ir como sobre hielo y la elección de Pirelli de neumáticos tan conservadora y dura parece que no facilita las cosas. En la carrera se podría realizar una sola parada si el clima no es demasiado cambiante y se corre en seco, puesto que podría llover durante este fin de semana.
Algunos como Verstappen han iniciado el fin de semana muy bien, colocándose primero en la tabla de tiempos de los libres 1, aunque tras saltarse una curva, pero ha estrellado su coche contra las barreras en la última curva en las primeras vueltas de los libres 2. Otros como los McLaren han iniciado con mal pie: Alonso ha cambiado su motor por los problemas sufridos en Austin y penalizará por su 11º cambio de motor. Su compañero, Button, batirá récord de penalización por poner un nuevo motor en los libres y otro para correr en clasificación y carrera, las dos unidades de potencia le costarán 50 puestos en parrilla.
Rosberg tampoco ha comenzado bien, cuando sus frenos traseros se han incendiado durante los libres. Y veremos si la fiabilidad no se convierte en un problema agregado para