Hace ya meses que caímos rendidos ante el superlativo Volkswagen Golf Mk2 de 1.233 CV preparado por Boba Motoring. Estos alemanes crearon un Golf capaz de merendarse prestacionalmente a un Bugatti Veyron. Una máquina de órdago, legal para las carreteras, de la que aún no teníamos demasiado material audiovisual. Para terminar 2015, han decidido demostrarnos en vídeo de lo que este brutal Volkswagen es capaz. Disfrutemos de su violencia mecánica en carretera y circuito. Os aseguro que no os arrepentireis.
Este Volkswagen Golf es el sleeper definitivo, por fuera apenas se distingue de los miles de Mk2 con preparaciones ligeras.
Desde fuera, este Golf pasa completamente desapercibido: es negro, tiene unas llantas de 17 pulgadas y un escape de grandes dimensiones, pero eso es todo. Su interior se mantiene de serie – ni siquiera era un GTI en origen – y sólo la palanca de cambios secuencial podría darnos alguna pista de la bomba atómica que esconde bajo el capó. Un bloque de hierro procedente de un 1.9 TDI al que se le ha montado la culata de un GTI 2.0 16v y sobre la que se ha realizado una desproporcionada preparación mecánica, que lleva su potencia hasta los 1.233 CV.
Un gigantesco turbocompresor, componentes internos de competición y una caja de cambios secuencial, conectada a un sistema de tracción total permanente tipo Haldex, y totalmente ajustable a voluntad del conductor. Con su turbocompresor soplando a 4,4 bares – sí, habéis leído bien – es capaz de quemar rueda a 200 km/h y pulverizar el cronómetro. Es más rápido que un Bugatti Veyron, pero también es más rápido que un Koenigsegg Agera RS. Directamente se ríe en la cara de los McLaren P1, LaFerrari y Porsche 918 Spyder.
¿No le creéis? Mirad los tiempos que se marca, certificados por GPS RaceLogic:
0 a 100 km/h: