Estás buscando coche de ocasión y de repente, ves un coche de segunda mano con pocos kilómetros para su edad y un precio realmente bueno. Aunque los chollos existen, son menos frecuentes de lo que pensamos. Por desgracia, la picaresca de algunos vendedores – tanto particulares como compraventas – les lleva a practicar afeitados de kilómetros a los coches que ponen a la venta. Una práctica completamente ilegal que en ocasiones puede ser difícil de detectar. Con estos cinco trucos podrás detectar si los kilómetros del coche son reales.
1) Solicita un informe en la Dirección General de Tráfico
Por una tasa de 8,30 euros podremos saber si el vehículo tiene cargas y el kilometraje marcado en la última ITV.
En la DGT – o la dirección de tráfico correspondiente en País Vasco y Cataluña – es posible solicitar un informe llamado “Informe del Vehículo”. En este informe es posible ver si el vehículo tiene cargas de las que el comprador nos ha informado, si sus ITV están en orden así como el kilometraje registrado en la última ITV. Es una primera aproximación y recomiendo solicitar este informe en toda compra de un vehículo usado. Con certificado digital se puede solicitar por Internet, de lo contrario tendrás que acudir a una oficina de la DGT.
Otra opción es el informe de Carfax. Es un servicio muy popular originado en EE.UU., y consiste en un informe ampliado similar al de la DGT. En este informe se nos dice si el coche ha sido robado en alguna ocasión, los registros de mantenimiento en concesionarios oficiales – así como el kilometraje cuando pasó dichas revisiones – y si el vehículo ha tenido un uso comercial o estuvo registrado como taxi. También nos permite saber si es un vehículo nacional o es un vehículo de importación, cuyos