Hace aproximadamente un año, Jeremy Clarkson se enfadó como un niño pequeño. Un niño pequeño de cincuenta y pico años. No pudo ordenar un filete en el restaurante al que acudieron tras un largo día de rodaje… y terminó propinándole un puñetazo a Oisin Tymon, un productor del programa. El hambre es mala consejera, y esta trifulca fue la última que la BBC soportó, rescindiendo unilateralmente su contrato. El británico ha recientemente saldado su deuda con Oisin Tymon. Esta rabieta le salió muy, pero que muy cara.
Clarkson, Hammond y May estrenarán pronto un nuevo programa de coches en Amazon Prime Video. El trío calavera sigue activo.
Jeremy Clarkson ha alcanzado un acuerdo extrajudicial con Oisin Tymon, que por supuesto, había demandado a Clarkson por su comportamiento. No sólo recibió un puñetazo inmerecido en su cara, Clarkson también le faltó al respeto por sus orígenes irlandeses – sí, parece que aún están metiendo el dedo en llagas del pasado. Sea como fuere, Clarkson pagará a Tymon “una cantidad superior a 100.000 libras esterlinas”. Es decir, que el productor de Top Gear se llevará a casa cerca de 150.000 euros por haber recibido un puñetazo.
Una vez, cuando era adolescente, unos “jóvenes descarriados” me propinaron un puñetazo. Si me lo hubiese propinado Clarkson ahora mismo tendría un Porsche 911 en el garaje. Además de esta jugosa compensación económica – hay abogados especializados en este tipo de demandas – el presentador británico se ha disculpado de forma sincera y oficial por su comportamiento. Según el Evening Standard británico, incluso han quedado en buenos términos, sin acritudes o problemas sin solucionar. En el fondo, eran compañeros de trabajo.
¿Por qué más de 100.000 libras?, te estarás preguntando. Por el simple hecho de ser Clarkson una personalidad pública y una persona adinerada. Estas demandas suelen