Mad Max: Fury Road ha sido una de las producciones más victoriosas en la última gala de los Oscar, que se celebró ayer mismo en Los Angeles. La película del directo George Miller ha sido para mí una de las más importantes del año, no sólo por lo entretenida y adictiva que me resultó, sino porque fue una de las que menos efectos especiales empleó en su rodaje, llevando al mínimo el contenido generado por ordenador. Sus seis galardones son muy merecidos, en la opinión de un servidor.
Sus protagonistas no se llevaron ni un solo Oscar, en una gala en la que el nombre que más ha resonado ha sido Leonardo DiCaprio.
El thriller post-apocalíptico de George Miller ha sido una de las películas más intensas y bien rodadas que he visto en mucho tiempo. Si te gustan los coches y las películas de acción, Fury Road habrá sido tu película del año 2015. Aunque el Oscar a mejor película se lo ha llevado “Spotlight”, Mad Max ha recibido un justo reconocimiento a la labor técnica tras bastidores. Ha recibido concretamente el Oscar a la mejor mezcla de sonido, mejor edición, mejor maquillaje, mejor edición de sonido, mejor vestuario y mejor producción de diseño.
Un reconocimiento técnico que algunos tildan de insuficiente, para una película cuyo rodaje se demoró más de una década, con cambios inesperados de localización y estudios cinematográficos reticentes del proyecto. Sea como fuere, los Oscar es una ceremonia que no se debe tomar como objetiva, influenciada por cientos de objetivos económicos y políticos. Por supuesto que es parcial. En cualquier caso, nos alegramos que una de las películas del año haya sido justamente premiada.
Fuente: Autoblog
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