¿De verdad tiene sentido enfrentar a un Tesla Model S con un Boeing 737? No, no lo tiene. Salvo que quieras hacer un bonito vídeo promocional de tu aerolínea. Eso es lo que debieron pensar en Qantas cuando decidieron rodar este vídeo tan espectacular en el aeropuerto australiano de Avalon, cerca de Melbourne. Y es que si el Tesla Model S ya se ha enfrentado a deportivos y superdeportivos de muy diversa índole, ¿por qué no iba a hacer lo propio el sedán de moda de Tesla con un avión de pasajeros?
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Como ya te habrás imaginado el Boeing 737 no tiene rival. Hablamos de un avión que alcanza los 850 km/h. Lo interesante está en que el Tesla Model S sea capaz de adelantarse, por su mayor aceleración en el arranque, y mantener el tipo hasta que el Boeing 737 llega a su velocidad de despegue, los 140 nudos, que ya es una velocidad superior a los 250 km/h de punta que alcanza el Tesla Model S.
Con todo y con eso los escasos 3 segundos que necesita el Tesla Model S para practicar el 0 a 100 km/h en su modo Ludicrous siguen pareciéndonos una auténtica locura, para un vehículo con su peso, y con un propulsor eléctrico. Ver prueba del Tesla Model S.
Más allá de dejarnos un bonito vídeo, la razón que llevó a Qantas enfrentar a uno de sus Boeing 737-800, con capacidad para dos pilotos y 168 pasajeros, fue la de recordar los lazos que unen a la aerolínea con Tesla Motors.
Qantas escogió a Tesla como socio estratégico para colaborar en soluciones de sostenibilidad en el transporte. Más allá de eso, Tesla y Qantas intercambian servicios para sus clientes. De manera que los