Se dice, se cuenta, se rumorea que BMW va a reestructurar próximamente sus series deportivas más grandes. La marca bávara confirmó en el mes de marzo que iban a introducir un nuevo modelo posicionado por encima de la Serie 7, pero con un toque más deportivo. Una vuelta a los gran turismo cargados de lujo y potencia.
Según cuentan en Auto Express, los de la hélice habrían empezado ya los trámites para proteger las denominaciones 825, 830, 835, 850, 845, 860, M850 y M8. Ocho modelos con una misma planta que podría parecerse mucho al BMW Vision Future Luxury presentado hace dos años. Construido sobre la plataforma modular de fibra de carbono estrenada con los BMW Serie 7, rivalizando con los Mercedes-AMG S65 Coupé y Cabriolet.
Mucho más que un cambio de nombre
La irrupción del nuevo coupé prestacional alemán dejaría sin lugar al actual Serie 6 Gran Coupé, pero a cambio nos traerán algo mucho más divertido
Con ésta nueva hornada de coupés deportivos que podría llegar en 2020 abriéndose hacia arriba en el catálogo (además de una presumible versión descapotable), la próxima generación de Serie 6 pasaría a ocupar otra posición diferente. El papel de coupé de altas prestaciones se dejaría para su hermano mayor, y se buscaría un concepto mucho más radical. Y es que según parecen, en BMW están planteándose ofrecer un rival directo para el Porsche 911, algo con lo que ahora mismo no cuentan.
En su conversión perdería por el camino algo de tamaño para volverse más compacto y ágil que el modelo actual, y seguramente menos potente que los M6. Obviamente también debería dejarse algunos kilos y volverse menos burgués, entrando en la guerra desatada entre el Porsche, Audi R8, Jaguar F-Type o Mercedes-AMG GT. Para conseguirlo abandonaría su chasis actual en favor de uno con un enfoque