Aston Martin y Red Bull Racing han producido un coche realmente único. Un coche que borra la frontera entre un Fórmula 1 y un Aston Martin de calle. Se llama AM RB-001, y ha sido diseñado por Adrian Newey, cuya experiencia en diseño de coches de competición es realmente dilatada – así como su experiencia con la marca británica. Este escultural hiperdeportivo de fibra de carbono es aún un prototipo, pero el coche de producción será muy parecido y serán producidas un máximo de 150 unidades. Y no, no será nada barato.
“Un rendimiento al nivel de un LMP1”
Con este hiperdeportivo, Aston Martin quiere demostrar que está en la cresta de la ola en lo tocante a deportividad, prestaciones e imagen.
Será producido en Gaydon, de forma casi artesanal por los trabajadores más expertos de Aston Martin. Su producción será vendida por un precio de entre 2 y 3 millones de libras. El primer prototipo funcional saldrá a las carreteras a finales del año que viene, mientras que los clientes finales tendrán que esperar a principios de 2019 para poder poner sus manos sobre el volante. Será entonces cuando escuchen el espectacular rugido de su motor V12, situado en posición central-trasera, una gran novedad para la marca inglesa.
Ver la galería completa en Diariomotor
Este motor V12 será una unidad atmosférica, diseñada con el máximo rendimiento y pureza en mente. Nada de turboalimentación, como ha sido el caso del nuevo Aston Martin DB11. Un propulsor purista, de altísimo régimen de giro, posiblemente derivado del Aston Martin One-77. La nota de prensa no habla de hibridación, y tampoco han hablado los responsables de la marca en la presentación en directo que hemos podido ver en Periscope. No sabemos su potencia, pero sí el objetivo de relación peso-potencia.
Se producirán 25 unidades diseñadas para