Por desgracia no se trata de casos aislados y son muchos los que se ven obligados con cierta frecuencia a comer en el coche (en parado, no en marcha por favor). Los que primero se te vienen a la mente son los profesionales del volante (camioneros, repartidores, taxistas, etc.), pero también hay mucha gente que trabaja con el coche y, por horarios, les toca comer rápidamente y de cualquier forma.
Suele ser rápido reconocerlos, son esos que generalmente están parados en zonas un poco aisladas del tráfico rodado y peatonal, con el coche aparcado bajo la sombra de un árbol, muchas veces, en zonas de aparcamiento en batería pero con el coche puesto en línea a modo de radar justiciero, por lo que no es raro que generen múltiples frenazos y les piten los oídos mientras comen o se echan una cabezada tras su rápida comida.
Y esta necesidad de comer en el coche ha generado una oferta de accesorios para facilitar la vida a estos pobres conductores que deben alimentarse sin bajar del coche y en muy poco tiempo. Hay coches que vienen equipados con mesitas plegables tras los respaldos de los asientos delanteros, estos ya ofrecen una comodidad extra para este tipo de comida rápida, aunque bien es cierto que muchas de esas mesitas apenas soportan peso.
Bandejas de todo tipo, portavasos y hasta neveras para coche
Pero como hay otros muchos coches que no cuentan con esas mesitas, pues existen como accesorio. Se fijan al reposacabezas del asiento delantero con un anclaje fijo (como los soportes para las tablets) o mediante correas. Cuentan con portavasos, portabotellas y formas que facilitan la sujeción de los diferentes utensilios necesarios para comer.
Pero también las hay con una pinza para sujetarse a diferentes puntos, como por ejemplo el asidero de las puertas, o con ventosa