En España no está muy extendido el uso del cepo para inmovilizar vehículos que están mal estacionados o han incumplido alguna norma y los agentes deben evitar que se mueva. No está muy extendido pero sí hay regiones donde se utiliza.
Este cepo es temido no sólo porque si lo encuentras en tu coche significa que te toca pagar una multa antes de poder retirarlo, también porque es una pieza metálica pesada y de gran tamaño que fácilmente puede dañar tu vehículo al manipularlo, bien la llanta, la aleta o el interior del paso de rueda. No te preocupes, este sistema ha evolucionado (y mucho) para bloquearte la visión desde el parabrisas.
Que nadie tema por sus llantas porque una compañía neoyorquina llamada Ideas That Stick ha desarrollado un cepo llamado Barnacle que se adhiere al parabrisas del vehículo mediante dos potentes ventosas y bloquea la visión, por lo que impide circular con el vehículo.
Bueno, siempre puedes hacer como Jim Carrey en «Ace Ventura, detective de mascotas» y conducir mirando por la ventanilla, pero en este caso sonará una potente alarma (igual que si intentas manipularlo para quitarlo) y es muy posible que el importe de tu multa empiece a crecer peligrosamente.
Tendrás que devolverlo
Este curioso cepo está fabricado en material plástico y cuenta con más ventajas aparte de no causar posibles daños a los vehículos denunciados. Pesa poco, se pliega por la mitad y se puede apilar, por lo que los agentes pueden llevar varias unidades en cualquier coche patrulla.
Pero hay más, está pensado para pagar la multa en el momento desde el teléfono móvil y poder desbloquear este cepo tras recibir un código de desbloqueo. ¿Y qué hacemos con el cepo? A más de uno le apetecerá hacerlo trocitos o llevárselo de recuerdo, pero tendrás unos días de plazo para