Hay una cosa que une a todos los conductores independientemente de su poder adquisitivo. Ya vayas montado en un utilitario de los ’90, en un superdeportivo de altos vuelos o en una berlina insultantemente cara, siempre tendrás que pasar por la gasolinera (salvo que lleves un eléctrico, claro).
Si eres propietario de un Bentley y estás cansado de juntarte con la plebe, no te preocupes que tus problemas se van a acabar. La firma británica está poniendo a prueba un servicio de repostaje puerta-a-puerta en colaboración con la start-up americana Filld. Se acabó el ir a las engorrosas y sucias gasolineras.
Bajo el nombre Filld for Bentley el servicio permitirá hacer un pedido de combustible a través de una aplicación y recibirlo donde quiera que estés. Y bueno, si a los coches de combustión les queda suficiente vida como para que su inteligencia crezca lo necesario, ellos mismos podrán pedir el suministro cuando tengan sed dependiendo de su localización y de las preferencias establecidas por el propietario.
No hay muchos más detalles sobre este servicio pero me sé de unos cuantos que estarían encantados de que algo así se extendiera. Lo que sí ha anunciado Bentley es que el combustible se podrá suministrar donde y cuando el cliente lo necesite. Habrá que ver si tienen la infraestructura necesaria o cómo lo materializan.
De momento las pruebas se están llevando a cabo en San Francisco durante tres meses. Si la cosa sale bien quién sabe, quizá la experiencia de tener un coche de lujo se extienda ahora también hasta no tener ni que ensuciarte las manos para repostar.
Vía | Autocar
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