Hace veinte años cuando hablábamos de Hyundai y Kia muchos las desacreditaban porque sus diseños y en general sus coches no lograban acercarse a los europeos. Sin embargo el tiempo, el trabajo y las grandes inversiones que han realizado en I+D+i han dado sus frutos para situarlas en el lugar que se merecen. El diseño de sus coches está a años luz del que lucían antes de cambiar de milenio y si hablamos de calidad interior, mecánicas o tecnología de seguridad o info entretenimiento se pueden codear con las mejores marcas.
El año 2016 ha sido muy bueno para ambas firmas, pues han logrado vender en conjunto 7,88 millones de coches en el mundo. Sus ventas respecto al año 2015 se han incrementado un 4,7 por ciento y sus previsiones de cara al año que acabamos de inaugurar no pueden ser más halagüeñas. Según han declarado responsables del grupo sur coreano, para el próximo año esperan vender en el mundo 8,25 millones de coches.
Para cumplir con estos propósitos las cosas han de irles muy bien, pero como “grano a grano se hace granero” el Grupo Hyundai no ha dejado de trabajar durante este año para triunfar el que viene. El pilar básico para cumplir su estrategia de crecimiento en el mercado se basará en el lanzamiento de nuevos modelos en segmentos en los que están presentes o en aquellos en los que ahora no lo están.
Para ello cuentan con fábricas nuevas en China y México, que les permitirán aumentar su capacidad productiva para cumplir con sus clientes. Otra de las apuestas que van llevar a cabo es la introducción en el complicado mundo de la conducción autónoma. Para ello presentarán en el próximo CES de Las Vegas un prototipo autónomo sobre el híbrido Ioniq con el que mostrarán el público su