La Ford F-150 (F-Series) es el modelo más vendido en los Estados Unidos y la firma del óvalo no quiere que la competencia le robe el terreno que han logrado alcanzar con tantos años de trabajo. Sus ventas crecen año a año y ahora que RAM y Chevrolet van a realizar cambios en sus pick up más vendidas han comunicado que en el Auto Show de Detroit presentarán un profundo restyling de la F-150.
Hace solo tres años que llegó la actual generación y como avance significativo respecto a la anterior iteración incorporó varias partes en aluminio. Para esta ocasión la marca realizará un profundo rediseño de su parte frontal retocando faros (la parte que se verá más afectada), parrilla y paragolpes. Sin embargo la principal novedad no vendrá en forma de retoque estético sino debajo del capót delantero.
Gordon Platto, diseñador de Ford encargado de reestilizar la F-150, ha comentado que quieren acercar el diseño de la pick up más pequeña de la firma a las Super Duty. Éstos cambios se centrarán sobre todo en la forma de C que tendrán los faros principales (que incorporarán tecnología Led para las luces diurnas). Rematarán los cambios estéticos unas nuevas llantas de aleación de entre 17 a 22 pulgadas, así como unos nuevos apliques para rematar la tapa trasera de la caja.
A estos cambios estéticos se une la principal novedad de este modelo. La gama mecánica de este vehículo contará con cinco propulsores y entre ellos, por primera vez en su historia, tendrá un bloque diésel. La opción escogida es un 3.0 litros en configuración V6 que rendirá una potencia cercana a los 250 cv. Además estará unida a una caja de cambios automática con 10 velocidades. La firma ha comunicado que esta versión no llegará al mercado hasta el año 2018 pero tras