El Reliant Robin es prácticamente un chiste sobre ruedas. Es un coche de tres ruedas que fue creado como alternativa en Reino Unido a los conductores que no poseían un carnet de turismo convencional. Aunque Reliant fabricó coches convencionales, es conocida por los Robin de tres ruedas, que Top Gear humilló públicamente durante años y años, provocando su vuelco. Lo cierto es que los Reliant Robin tenían varias peculiaridades interesantes, y una de ellas era que su carrocería estaba construida en fibra de vidrio. Durante décadas, fue uno de los fabricantes más punteros en el uso de este material en el sector del automóvil.
Reliant también fabricó piezas en fibra de vidrio para los sectores ferroviario y aeronáutico.
Reliant siempre tuvo una relación estrecha con Ford, y ya en los años 60 los preciosos Scimitar usaron motores Ford de las familias Zephyr y Essex. Aunque Reliant produjo sus propios motores en años venideros, siempre recurrieron a Ford para los motores más potentes. A mediados de los años 80, Ford estaba desarrollando el brutal RS200 con un único objetivo en mente: ser el Grupo B más rápido y exitoso. Para lograr ese objetivo el coche debía ser ligero y potente. De la potencia se encargaba Cosworth, con un motor BDT potenciado hasta los 400 CV. Para que el Ford RS200 fuese ligero, Ford decidió construir el RS200 con carrocerías de fibra de vidrio.
Ya que Ford iba a producir los RS200 en un volumen realmente bajo – se fabricaron 148 unidades de calle, siendo 24 convertidas a especificación Evolution – no les salía a cuenta construir moldes e invertir en utillaje y herramientas para la fabricación de los RS200. Decidieron subcontratar tanto la producción de las carrocerías como el ensamblaje final a Reliant. Aunque las carrocerías fueron diseñadas por Ghia, era Reliant quien