¿Por qué Toyota, Honda y Hyundai querrían unirse? Hasta donde sabemos, son empresas totalmente independientes, sin lazos, acuerdos colaborativos o pasados comunes. Sí comparten un objetivo de futuro: las tres corporaciones apuestan firmemente por el hidrógeno como combustible para el futuro, y todas han lanzado ya vehículos de pila de combustible. Esta meta común ha llevado a las tres empresas a unirse en una misiva al estado de California, al que buscan poner de su lado para parar los pies a Volkswagen. Quieren que el gigante alemán pague su multa por el escándalo del Dieselgate de otra manera. Os ponemos en contexto.
BMW y Ford también han objetado al control de Volkswagen de cientos de estaciones de recarga.
Tras el escándalo de los TDI trucados, el Grupo Volkswagen se ha visto abocado a pagar compensaciones millonarias a los dueños de vehículos trucados, a recomprarlos y en muchos casos reciclarlos – cuando no era posible su reparación. Además, han obligado al consorcio alemán a invertir 2.000 millones de dólares en infraestructuras de movilidad sostenible. Volkswagen quiere hacerlo construyendo una extensa red de puntos de recarga para coches eléctricos. Adivinad qué grupo automovilístico planea lanzar multitud de coches eléctricos en los próximos años. Las quejas de otros fabricantes no han tardado en llegar.
En su plan inicial para el estado de California, Volkswagen está obligada a gastar 120 millones de dólares. Su plan propone la instalación de 400 puntos de recarga en zonas de alto tráfico y densidad de población. Otros fabricantes se quejan de que ya existe infraestructura en dichas zonas, y que deberían instalar puntos de recarga en zonas con menos cobertura. La California Air Resources Board (conocida por su acrónimo CARB) está estudiando la aprobación de este plan, que de comenzar, daría su pistoletazo de salida en 2019. Mientras tanto, debe escuchar