Porsche ofrece un catálogo enorme de opciones a la hora de comprar un Porsche 911. Que si lo más de lo más con el Porsche 911 Turbo S, que si un animal de trackday con el Porsche 911 GT3, que si ediciones especiales de todo tipo, que si un Porsche 911 R o un Porsche 911 GTS… pero nuestra atención hoy se fija en el primer escalón en el Porsche 911 “a secas” y el dilema de si lo compramos con tracción a las cuatro ruedas o no.
Lo primero: cuatro ruedas motrices nos ofrecen más seguridad que un coche de propulsión
Empecemos por lo evidente, por el hecho de que contar con un par de ruedas más ofreciéndonos más tracción repercute, claro, en un extra de seguridad que se hace aún más patente cuando vivimos en zonas donde las inclemencias del tiempo nos dejan con lluvias habituales, bajas temperaturas y alguna que otra nevada. Además, meteorología al margen, su comportamiento en curva en conducción deportiva va a ser más dócil y podemos llegar a ahorrarnos algún que otro susto.
¿Sabías que el maletero del Porsche 911 Carrera es más grande que el del Porsche 911 Carrera 4?
La distribución mecánica del Porsche 911, con el motor en posición trasera, nos brinda una capacidad de carga bastante limitada, todo lo contrario que sus “hermano pequeños” los Porsche 718 Boxster y Porsche 718 Cayman que curiosamente es aún más limitada cuando se trata de la versión con tracción total.
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El maletero del Porsche 911 Carrera es de 145 litros mientras que el del Carrera 4S es de 125 litros. 20 litros de diferencia no van a determinar una compra, evidentemente, pero es un dato curioso que normalmente no se suele mentar.
Hablemos de estética: El Carrera 4S es