Cuando veíamos el anuncio de “Algo está pasando en Mercedes” no podíamos imaginar que además de la llegada del nuevo Clase A vendrían otras sorpresas. La primera nos la dieron en la frente con la incorporación del bloque diésel 1.5 dCi con 109 cv de Renault. La segunda la consolidación en la marca de la estrella de una plataforma de tracción al eje delantero. Técnicamente es algo que no pega con una marca premium como Mercedes-Benz, pero a nivel económico es lo que ¿necesitan? para ser rentables.
La actual plataforma MFA de tracción delantera de Mercedes-Benz va muy bien dinámicamente pero tiene algunos problemas técnicos que serán solucionados en su segunda iteración. La MFA2 es el nombre que tendrá y, si se solucionan los conflictos que hay con Nissan e Infiniti, dará vida a más de una docena de modelos. Por lo pronto el primer modelo que llegue al mercado sobre ella será el sucesor del actual Clase A, pues su ciclo de vida está a punto de entrar en declive.
Sin embargo, en el Salón del Automóvil de Shanghai hemos tenido noticias de qué está planeando la firma alemana. Según Ola Källenius, miembro del Consejo de Administración de Mercedes-Benz, la nueva plataforma de tracción delantera servirá para crear hasta ocho nuevos modelos dentro de la marca. En la cita asiática Källenius no dijo cuáles serían los modelos que se basarán en la MFA2, pero por el empleo que tiene la actual base no es difícil averiguar su segmento y nombres.
El Clase A en sus diferentes variantes de carrocería (hatchback, sedán y sedán con batalla extendida para China) será el primero. Tras él llegará el monovolumen compacto, Clase B, y cerrarán la terna los CLA, GLA y nuevo GLB. Estos modelos representan la puerta de acceso al portfolio del fabricante alemán y