El Gobierno ha aprobado el Movea (Plan de Impulso a la Movilidad con Vehículos de Energías Alternativas), que está destinado a incentivar la compra de vehículos de energías alternativas y, también, el desarrollo de nuevas infraestructuras de recarga. Este nuevo plan, que sustituyó en su primera edición al extinto PIMA Aire, ha entrado en vigor el pasado 16 de junio. El plazo finalizará el 15 de octubre de 2017, salvo que se agote con anterioridad la partida presupuestaria.
¿Qué es el Plan MOVEA?
Este plan, que contará con presupuesto de 16,6 millones de euros está destinado para vehículos de combustibles alternativos, vehículos eléctricos, eléctricos de autonomía extendida (REEV), propulsados total o parcialmente mediante motores de combustión interna de gasolina o gasóleo y eléctricos, híbridos enchufables (PHEV) propulsados total o parcialmente mediante motores de combustión interna de gasolina o gasóleo y eléctricos vehículos que puedan utilizar combustibles fósiles alternativos, homologados como GLP/Autogás, GNC, GNL o bifuel gasolina-gas, vehículos que se propulsen con pila de combustible de hidrógeno.
La finalidad de dicho plan, es la de fomentar una movilidad más limpia, mejorar las infraestructuras para la recarga de los vehículos eléctricos y conseguir una menor dependencia del petróleo. De hecho, por primera vez, un Gobierno pone en marcha un Plan que contempla, desde una perspectiva integrada, el impulso al vehículo de tecnología alternativa y su infraestructura asociada, éste último un aspecto clave para garantizar un mayor desarrollo del mercado de este tipo de vehículos.
Las subvenciones de solicitudes realizadas al Plan MOVEA, se destinarán a la adquisición directa o a la adquisición por medio de operaciones de financiación por leasing financiero o arrendamiento por renting (también llamado leasing operativo) de vehículos nuevos –en el caso del renting, se exige un contrato mínimo de dos años-. También se aplicarán a la adquisición de vehículos eléctricos de hasta nueve