Si sois seguidores de la Fórmula E, sabréis que hay un equipo alemán llamado ABT Schaeffler. Muchos conoceréis a los que son uno de los preparadores oficiales de Audi desde sus inicios, ABT Sportsline.
Esta empresa alemana, con sede en Kempten, fue creada en 1970 por Johann Abt, un piloto de carreras de Abarth. No fue hasta el 2002, cuando ABT, junto a Audi, crearon el TT-R, utilizado en la DTM Alemana, y que logró el título de aquel año para el piloto francés Laurent Aïello.
Como ya hicieran otras marcas como Jaguar o Renault, la temporada 2017-2018, la cual comienza en diciembre, estará marcada por la incorporación de Audi en las filas de este campeonato de monoplazas eléctricos.
Audi sería, de momento, la única marca alemana en el campeonato, aunque BMW tiene una colaboración en los aspectos técnicos con el equipo americano Andretti Formula E Team (el mismo equipo con el que Alonso corrió en las 24H de Indianápolis), y además, el Safety Car de esta categoría es un BMW i8. Mercedes no se podía quedar atrás, y están considerando la entrada en la Fórmula E en la temporada 2018-2019, lo cual sería una genial noticia para impulsar, aún más, esta nueva categoría de monoplazas.
Audi, la cual ha estado involucrada indirectamente en la Formula E desde el inicio de esta categoría, en 2014, apoyando a ABT Sportsline, tomará el control creando el Audi Sport ABT Schaeffler Team. Además están desarrollando un nuevo tren de rodaje para la nueva temporada.
“Que Audi sea la primera marca alemana en estar completamente involucrada en la próxima temporada de Fórmula E es un claro compromiso de nuestra marca con la movilidad eléctrica” afirmó Peter Mertens, miembro del Departamento de Desarrollo Técnico de Audi.
La afirmación de Peter Mertens no es más que una ratificación de lo que venimos hablando días