Hablar del Deutsche Tourenwagen Masters es hablar de Mercedes-Benz. Junto a BMW y especialmente Audi, la firma de la estrella ha sido una de las incondicionales del campeonato, acompañándolo en su camino desde su entrada oficial primero en ITC y después, en 1998 en el renacido DTM. Precisamente 20 años después de volver a reencontrarse con el Campeonato Alemán de Turismos, en 2018, Mercedes-AMG le dirá adiós, en busca de un campeonato que le permita seguir investigando en nuevas tecnologías y promocionando otros modelos.
Después de una primera temporada en el Deutsche Produktionswagen-Meisterschaft en la que arrasó el BMW 635 Ci y en la que el pesado 380 SLC poco pudo, la llegada del 190E en 1986 comenzó a dar resultados, consiguiendo Roland Asch seis victorias y 2 poles encuadrado dentro del equipo BMK. Tras algunos coqueteos con las posiciones del podio, Klaus Ludwig consiguió llevar a la Evo2 a lo más alto en la temporada de 1992 con el equipo AMG, justo un año después de Mercedes consiguiese su primer título de constructores.
Seguramente el Mercedes 190E 2.5 16 Evo2 sea uno de los vehículos más recordados del fabricante dentro del campeonato, especialmente por sus formas angulosas, su gran alerón trasero y su protagonismo en la que sin duda fue una de las épocas doradas del campeonato. Sus números reflejan hasta 190 victorias entre 1988 y 1993 con las dos versiones, llevando a Ludwig a anotarse el campeonato sólo escapándose 8 de las 24 victorias posibles en 1992. Ellen Löhr, la actual piloto del Campeonato de Europa de Camiones también consiguió vencer a su volante, convirtiéndose en la única mujer que lo ha logrado en la larga historia del ITC/DTM.
Su relevo, el Clase C sería incluso más exitoso, aunque se vio ‘cortado’ por la ruptura que se produjo en el campeonato en