El año pasado un súper kart con motor de Honda CBR 1000 RR y una botellita azul desató la locura al ser capaz de dejar en ridículo a rivales de dos y cuatro ruedas con más de 2.000 caballos.
Sin duda, su relación peso-potencia y la capacidad que tiene para acelerar son algunas de las claves de este mata gigantes que ha vuelto, esta vez para enfrentarse a una Suzuki Hayabusa 1300R llevada hasta los 400 caballos. Sube el volumen, merece la pena.
El súper kart está compuesto por un chasis de kart debidamente reforzado en algunos puntos sobre el que han instalado un asiento tipo backet, pero la clave de todo está detrás del asiento.
Allí se aloja el motor de Honda CBR 1000 RR que, además de hacer un ruido realmente espectacular, también desarrolla más de 230 caballos de potencia. Se trata de una cifra descomunal para un artilugio que apenas pesa más de 140 kilos con el piloto incluído.
Cifras de superdeportivo para el kart de la botellita azul
El súper kart participó en varias drag race en Alemania. Pilotado por un tal Sebastian Scholz, sus cifras dan miedo y poco tienen que envidiar a las de los mejores superdeportivos del mercado.
Hablamos de un juguete para niños grandes capaz de hacer 0 a 100 km/h en 2,4 segundos alcanzar una velocidad punta de 320 km/h y parar el crono en el registro del cuarto de milla en sólo 9,1 segundos.
Sin duda se trata de números capaces de sobrecoger a cualquiera, y lo cierto es que hay que tener mucho valor para llevarlo y dominarlo, porque no debemos olvidar que en un súper kart de este tipo el piloto va expuesto con su cuerpo a cualquier accidente que pudiese ocurrir.
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