Ya han pasado más de 30 años desde el nacimiento del primer BMW M5 y este nombre sigue siendo, ahora más que nunca, sinónimo de deportividad, del sedán de lujo de altas prestaciones. El nuevo BMW M5 2017 ya está aquí, con un relevo generacional que acompaña a un BMW Serie 5 muy tecnológico y ligero. BMW sigue sorprendiéndonos con un nuevo BMW M5 que se mantiene fiel al motor de ocho cilindros y turbo empleado en los últimos años, que aumenta su potencia hasta los 600 CV y que apuesta, por primera vez, por la tracción a las cuatro ruedas. Pero, tal y como veremos a continuación, este BMW M5 no desmerecerá, ni mucho menos, las sensaciones que se esperan de un M5, y las sensaciones que ya ofrecían sus predecesores.
Un motor V8 biturbo de 600 CV de potencia
El BMW M5 seguirá escondiendo bajo el capó un motor de ocho cilindros en uve y doble turbo. Los motores de ocho cilindros han acompañado desde finales de los noventa al BMW M5, con la excepción de un E60 que empleó un motor V10, y de las primeras generaciones que empleaban un motor de seis cilindros en línea. Aunque el motor sea esencialmente el mismo que ya empleaba la anterior generación del BMW M5 – al menos su bloque – sí ha habido mejoras de importancia, como el estreno de nuevos turbocompresores, sistemas de inyección y refrigeración.
Finalmente nos encontramos con un BMW M5 con un motor que entrega 600 CV de potencia entre 5.600 y 6.700 rpm y nada más y nada menos que 750 Nm de par máximo, gran parte de ellos entregados desde las 1.800 rpm, constantemente hasta las 5.600 rpm.
El nuevo BMW M5 seguirá contando con un motor V8 de doble turbo, que ahora alcanza los 600 CV