Los KPIs de marketing digital son los que realmente dan sentido a cualquier estrategia. Contar con la capacidad de poder medir cada acción al detalle es lo que diferencia, principalmente, el marketing digital del tradicional.
Sobre todo cuando los KPIs de marketing digital se adaptan a cualquier medio y estrategia. Y esto es muy importante.
Cuando un usuario está interesado en cierto producto, su investigación siempre parte de Internet. Muchas empresas lo saben y no han querido tardar ni un segundo más en hacerse visibles en el mundo virtual.
De hecho, los expertos aseguran que durante el próximo año, los responsables de marketing inteligentes aumentarán sus presupuestos publicitarios online hasta un 15%.
Y tal y como has leído al principio y como habrás podido comprobar por tu cuenta. Sin unos buenos KPIs de marketing digital, toda estrategia carece de valor.
Un KPI, al igual que un objetivo, debe ser SMART
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Los indicadores siempre se escogerán en función del tipo de campaña que lances. Y principalmente dependerán de tus objetivos. Sobre todo porque ambos deben ser SMART para conseguir resultados lógicos.
Una buena relación entre un objetivo y un indicador de rendimiento (o KPI) es lo único que necesitas para tener resultados reales. Aunque si quieres que sean exitosos, eso dependerá de la estrategia de marketing que estés lanzando en el momento y de cómo la trabajes.
Esta relación es la encargada de mostrarte cómo se han cumplido tus metas. En qué fallan, qué se debería cambiar, etc. Marcando un rumbo fijo absolutamente durante toda la estrategia. Es así como deben ser los KPIs de marketing digital:
Específicos. Cuando trabajes en una acción debes detectar qué se mide, cómo lo harás, dónde y cuándo. No dejes que quede ningún cabo suelto.
Medible. Lógicamente el indicador que escojas debe permitirte cuantificar esos posibles beneficios.
Alcanzable. Si quieres medir el engagement de una acción