Las camperizaciones de fábrica son un filón que varios fabricantes de vehículos comerciales están comenzando a explorar. Volkswagen ha dado en el clavo con las California, unas Transporter camperizadas de serie, con cocina, cama y mobiliario que las convierten en autocaravanas en miniatura. Volkswagen es la marca que más ha aprovechado el tirón de las “camper van”, pero también Mercedes ha sacado una buena tajada con sus Marco Polo y Westfalia. Ahora es el turno de Opel, que da sus primeros pinitos en el segmento con la Vivaro Life, la Opel Vivaro que se transforma en un pequeño hotel rodante.
Antes de nada, hemos de aclarar que el nivel de camperización de esta furgoneta no llega al de otros rivales. Y es así por dos motivos fundamentales: carece de cocina y aseo, y también carece de un techo extensible donde colocar una cama. No obstante, tiene varios alicientes que la convierten en más que una simple furgoneta de pasajeros. Es una furgoneta cuya segunda fila de asientos – dos asientos individuales – giran, pudiendo enfrentarse a los de la fila trasera. De forma opcional, se puede instalar una mesa plegable entre ambas filas, lográndose una perfecta sala de estar rodante.
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Es una de las novedades de Opel en el Salón de Frankfurt, junto al Opel Insignia GSi Sports Tourer familiar.
Otro detalle a tener en cuenta es que las dos filas traseras se pueden plegar, formándose una superficie plana que se desdobla como cama. Con un saco de dormir o un colchón de espuma ya se puede disfrutar de una cama de dimensiones matrimoniales. Además, bajo la misma aún hay espacio de sobra para el equipaje. La iluminación del espacio destinado al pasaje es LED y de forma opcional se puede encargar un sistema auxiliar de calefacción.