Aunque no te suene de nada, lo cierto es que Changan es uno de los mayores fabricantes del gigante asiático. Hoy en día se dan dos movimientos empresariales muy definidos. El primero es la introducción mediante nuevos modelos de los fabricantes tradicionales para tener mayor impacto en economías emergentes.
El segundo, por otro lado, consiste en los fabricantes de dichas economías intentando ganar su hueco en la cuota de mercado de economías ya consolidadas. Esto es lo que trata de hacer la firma china, la conquista de Europa, a base de crossovers y SUV.
Uno de los ejemplos de este movimiento de Changan es el CS55 SUV, un rival perfecto para el Nissan Qashqai, uno de los SUV más vendidos en Europa. Además, el fabricante no opera solo desde China, sino que tiene centros investigación y desarrollo en Reino Unido, Estados Unidos e Italia.
Changan, a pesar de ser bastante desconocida en Occidente, es una firma con historia. La marca como tal tiene más de 150 años, y llevan fabricando automóviles desde los años 50. Gracias a la colaboración con marcas como Ford o Mazda, ha logrado convertirse en el cuatro fabricante respecto a volumen de coches producidos en China.
Además de la expansión hacia Europa, Changan también tiene puesto el punto de mira en Sudamérica, Oriente Próximo y Rusia. Su hueco de mercado son los vehículos generalistas, así que muy probablemente Volkswagen, Nissan o Renault no estén muy contentos con la llegada de no solo Changan, sino varios fabricantes chinos a nuestro continente.
Por otro lado, el Changan CS55, tiene un diseño claramente inspirado en el Land Rover Range Rover, aunque su precio será claramente inferior. En su interior podemos encontrar una consola central que se asemeja a la que Volvo monta en su nuevo Volvo XC60. También conocemos que la construcción de estos